VISIÓN NIETZSCHEANA EXPUESTA DE LA MUJER EN “LA GAYA CIENCIA”

Para realmente poder comprometernos con el trabajo de Nietzsche acerca de la mujer expuesto en La Gaya Ciencia; quisiera ahondar un poco como preámbulo en esta investigación en la visión expuesta en fragmentos de “Así hablo Zarathrustra”, con el fin de comprender mejor la visión del autor.

En “Así hablo Zarathrustra “; Nietzsche asoma su perspectiva de lo que asume es el rol de la mujer en el mundo y en la sociedad:

“ Cuando hoy seguía solitario mi camino, a la hora en que el sol se pone, me encontré con una vieja que habló así a mi alma: Zarathrustra ha hablado muchas veces con nosotras las mujeres, pero nunca nos ha hablado de la mujer. Y yo respondí: De la mujer sólo se debe hablar de hombres. (…)Todo en la mujer es un enigma, con una solución única: embarazo. El hombre es un simple medio para la mujer; el fin es siempre el hijo. Pero ¿Qué es la mujer para el hombre? . Dos cosas quiere el hombre auténtico: peligro y juego. Por ello quiere a la mujer el más peligroso de los juegos .El hombre debe ser educado para la guerra y la mujer para el solaz del guerrero. <<Dame tu pequeña verdad, mujer>>, dije yo. Y la vieja habló así: <<¿Vas con mujeres? No olvides el látigo>>.”

Nietzsche, Friedrich.”Así habló Zarathustra”. Pág.50 y 51

El autor sostiene que la mujer se ve plenamente realizada en el momento de la concepción de un hijo y que utiliza al hombre como medio para obtenerlo. Sin embargo, también podemos notar que el hombre utiliza a la mujer con el fin de justamente preservar y cuidar la prolongación de su especie y de su sangre. En cierto modo es cierto que la realización plena de una mujer viene dada con la concepción de otro ser, fruto de si misma y de la persona que ama o que solo vio como potencial padre para sus hijos, ya que a la mujer biológicamente se le da el poder y la responsabilidad para la concepción y desde muy pequeña se le educa socialmente para este rol. Si denotamos el hecho de que una mujer está biológicamente dotada para la posibilidad de que en un embarazo sea múltiple o normal sólo pueda concebir de un hombre, por su parte el hombre puede fecundar a varias mujeres al mismo tiempo sin ningún problema. Entonces ¿Qué pasa con la mujer? ¿Seremos nada más calculadoras y frívolas, para que a la hora de “enamorarnos” nos fijemos en el probable espécimen para la reproducción de nuestra especie? Probablemente sí, pero lo que si es seguro es que seamos mujeres u hombres existe una fuerza que va más allá de nosotros como individuos que es, el amor. Quizás sea cierto que la mayoría de las mujeres buscan en el hombre es la fuente potencial de la próxima vida a engendrar. Pero también es probable que los hombres se vinculen con una mujer justamente por su capacidad reproductiva, si algo deja esto en claro es que quizás el amor entre parejas sea una utopía pero el amor a la extensión de sus genes no lo es.

De la perspectiva  expuesta en La Gaya Ciencia; hemos extraído alguno de los aforismos más significativos en los que Nietzsche habla directamente de la mujer y su rol en la vida, no sólo en la vida cotidiana sino en la línea del pensamiento. Veremos pues como la idea primordial que tiene el autor sobre lo que representa la mujer y el rol que desempeña la misma en muchos ámbitos de la vida; se mantiene, pero las trata de una manera más elaborada. En lo que sigue, analizaremos siete de los 15 aforismos en los que Nietzsche habla sobre la mujer y su influencia en el mundo de su época.

“60. Las mujeres y su acción a distancia. (…)Cuando un hombre es presa de su propio tumulto, se encuentra en medio de la resaca de sus impulsos y proyectos; sin duda que entonces ve ante él deslizarse también a unos seres encantadores y silenciosos , cuya felicidad y retiro envidia … Esos seres son las mujeres. (…) El encanto y la acción más poderosa de las mujeres es, hablando en términos filosóficos, una actio in distans, una acción a distancia: pero para ello se precisa ante todo…¡distancia!”Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 89 y 90

En este aforismo Nietzsche habla de la mujer como fuente de inspiración del hombre en cuanto a la felicidad y a veces distancia con la que puede mostrarse ante los hombres; una distancia que para el autor es descriptiva de la mujer, probablemente lo que se quiere reflejar en este fragmento es la capacidad de la mujer de actuar meticulosamente en algunas oportunidades en las que podríamos ser mas pasional que los hombres si se tratara de un hijo por ejemplo, pero en cuanto a la pareja y demás aspectos de la vida de una mujer solemos andar con bastante desapego y hasta sobriedad.

“64.Escépticas.Temo que las mujeres cuando envejecen se vuelven, en el rincón más íntimo de sus corazones, más escépticas que todos los hombres; éstas creen que la superficialidad de la existencia constituye su verdadera esencia; y toda virtud, toda profundidad no es, a sus ojos, sino encubrimiento de esta <<verdad>>, encubrimiento sumamente deseable de un pudendum…por consiguiente, una cuestión de decoro y de decencia ¡y nada más!”Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 91

El sentido de que la mujer sea más preocupada por lo externo tiene que ver también; a mi juicio, con las perspectivas de reproducción y de éxito a la hora de que el hombre pueda fijarse en ella como instinto natural de atracción, lo que la mayoría de los hombres se fijan de manera instintiva en primer lugar es en el físico, no en su preparación intelectual ni en demás cualidades, en sentido primario la primera relación de atracción que existe de un hombre hacia una mujer es la atracción física. No solo eso, la mujer tiene por así decirlo una fecha de expiración de su capacidad reproductiva; cuando la menopausia ha llegado al seno de la mujer ya las probabilidades de quedar embarazada se pierden, y la menopausia es un símbolo claro para la mujer de que esta envejeciendo.

“65.Entrega. Hay mujeres nobles pero en cierto modo pobres de espíritu que no saben expresar su entrega más profunda como no sea ofreciendo su virtud y su pudor: lo mejor que tienen. Y a menudo quienes aceptan ese regalo se comprometen mucho menos profundamente de lo que se suponen las donantes, ¡es una historia triste!”Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 91

En este aforismo es donde creo que tanto mujeres como hombres estarían de acuerdo, ya que tanto para mujeres como para hombres sobre todo en la actualidad es visto de mala manera que para obtener cualquier favor o retribución se utilice justamente la forma primaria de atracción entre hombres y mujeres que es la forma física o si se ahonda más la forma sexual. Al percibir como primera oferta tu pudor o virtud, la otra persona lo menos que hace es valorarte y por eso de manera general no es retribuida de buena manera dicha acción. Esto se debería extender a todo ámbito de la vida porque el pudor y la virtud no se remite al resguardar una pulcritud sexual; la virtud tiene que ver con cualquier aspecto de la integridad moral y ética de una persona , como bien sabemos a la disposición a obrar bien de una persona y cuando es una disposición no tiene porque conllevar una recompensa si se renuncia a ella o a parte de ella.

“66. La fuerza de los débiles. Todas las mujeres se muestran muy sutiles a la hora de exagerar sus debilidades y hasta se ingenian para inventarlas con vistas a parecer frágiles como adornos a quienes dañaría incluso una mota de polvo: su existencia debe lograr que el hombre tome conciencia de su torpeza y se sienta culpable de ella. Así se defienden ellas de los fuertes y del <<derecho del más fuerte>>.”

“74. Las que no tienen éxito. Nunca tienen éxito esas pobres mujeres que se muestran ansiosas e inseguras, y hablan demasiado delante de aquél a quien aman, pues lo que seduce con mayor seguridad a los hombres es una ternura íntima y flemática”

Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 91 y 95

Siempre se ha creído que las mujeres son el sexo débil, obviamente si nos referimos al aspecto físico es la mayoría de los casos es así. Pero si nos centramos en el aspecto psicológico, anímico y hasta intelectual creo que el autor lleva con estos fragmentos mucha verdad, pues las mujeres solemos mostrarnos antes los demás sobre todo con el sexo masculino como débiles sólo con el fin de realmente ser las fuertes. Esto me recuerda a la paradoja de Hegel del amo y el esclavo, en realidad no sabríamos decir quien es más fuerte o quien depende más de quien , si el amo o el esclavo; pues ambos para que exista uno debe estar presente el otro. Así el esclavo que pareciese ser el más débil en esta relación, tiene su grado de fortaleza, dominación y necesidad del amo, ya que sin un esclavo no puede haber un amo.

Por otro lado, tampoco es atractivo ni para hombres ni para mujeres la inseguridad ni la ansiedad, el secreto está justamente en no mostrar que uno no tiene fe en sí mismo y que lo que dices esta exento de seguridad y propiedad. No hay nada peor que lidiar con las insuficiencias del ser humano, sean tuyas o peor de otros.

“71.Sobre la castidad femenina. Hay algo sorprendente y monstruoso en la educación de las mujeres distinguidas, que acaso sea lo más paradójico que existe. Todo el mundo está de acuerdo en educarlas dentro de la mayor ignorancia posible en cuestiones eróticas, para inculcar en sus almas un profundo pudor respecto a esta materia, así como una impaciencia extrema y una especie de necesidad de huir en cuanto se haga alusión a semejante tema. (…) La cuestión está en captar de pronto la contradicción que existe entre el amor y el pudor, en verse obligadas a experimentar en un tiempo arrebato, auto sacrificio, deber, piedad, el miedo que causa la inconcebible vecindad que hay entre Dios y el animal, ¡y no sé cuántas cosas más!(…) Las jóvenes se esfuerzan por mostrarse superficiales e irreflexivas; las más perspicaces fingen una cierta insolencia. Las mujeres tienden fácilmente a considerar a sus maridos como interrogantes acerca de su honor y a sus hijos como una apología o una penitencia; necesitan hijos, y los desean en un sentido completamente distinto al varón. En suma, ¡no se sabría ser lo bastante tierno con las mujeres! ”Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 93 y 94

En este aspecto dada la contemporaneidad creo que más bien llegamos a una era en que la información ha hecho su trabajo; sea sucio o beneficioso, pero lo cierto es que ya la mujer no tiene falta de información ni en el aspecto sexual ni en ningún aspecto de la vida cotidiana e intelectual; hoy en día con las posibilidades abiertas que tenemos a acceder a todo tipo de información sea a través de los libros, de internet, de los medios de comunicación, etc… es imposible pretender no saber un poco o mucho de todo. Sin embargo, creo que la magia que creen o sostienen algunas mujeres es jugar un poco con la ingenuidad por mantener el interés de su pareja o posibles parejas para con ellas o simplemente porque a la mujer le gusta más el misterio que lo puntual o descriptivo.

“72. Las madres. Los animales consideran a las hembras de distinto modo que los hombres; para aquéllos, el valor de la hembra radica en su carácter productivo. (…) Las hembras encuentran en sus pequeños la satisfacción de su necesidad de dominio, una propiedad, una ocupación, algo que entienden muy bien, con quien pueden charlar. Todo eso constituye el amor materno, un amor comparable al que siente el artista por su obra. El embarazo vuelve a las mujeres más tiernas, más sufridas, más medrosas, las dispone mejor para la sumisión.”Nietzsche, Friedrich. “ La Gaya Ciencia” Pág. 94

Por último tenemos este aforismo que habla de las madres en la vida animal, sino olvidamos que el hombre es considerado también un animal , aunque racional, un animal con instintos animales sean de depredación o etc… también el instinto maternal puede ser considerado un instinto animal, biológicamente la que esta diseñada para ser madre es la mujer, y ellos conlleva una serie de responsabilidades sociales, psicológicas y hormonales que se van desarrollando durante toda la vida de la misma para que en algún momento llegue dicha concepción y poder cumplir el rol por lo menos biológico adecuado. Es por eso que el instinto de dominación, de preservar, de propiedad, etc; afloran tan característicamente en la mujer y la acompañan durante toda la vida.

Creo que dada la visión expuesta a lo largo de esta investigación, queda claro que en realidad Nietzsche no es un misógino, por el contrario logró entender muy bien el rol y las capacidades de la mujer por lo que pudo realmente respetarlas y darles el puesto que se merecían aún en su tiempo.